El ayuntamiento de A Coruña apunta, a través de un comunicado, que avanza en la coordinación de acciones de cara a la definición del próximo concurso para la gestión de la planta de tratamiento de residuos de Nostián. El contrato, que es el de mayor presupuesto municipal (334 millones de euros en 17 años), caducó en enero de 2020 y la alcaldesa Inés Rey repitió una y otra vez que se licitaría antes de que acabara su primer mandato. Ya en el segundo, es el edil José Manuel Lage Tuñas el que pilota las reuniones de la mesa de trabajo entre el Ayuntamiento y el Consorcio de las Mariñas para llegar a un acuerdo y hacer posible un nuevo contrato.
En la reunión que tuvo lugar este viernes en el concello coruñés participaron por parte del Ayuntamiento de A Coruña el portavoz municipal y concejal del área de Economía y Planificación Urbana, José Manuel Lage, y la concejala de Medio Ambiente, Noemí Díaz, además de personal técnico. Por parte del Consorcio acudieron su presidente, José Antonio Santiso, y su vicepresidenta, María Barral, también acompañados por personal técnico.
El Gobierno municipal coruñés aounta ahora que antes de que finalice el año resolverá las alegaciones presentados al anteproyecto e introducirá mejoras de cara a perfeccionar los documentos técnicos de la licitación de la planta. El Ayuntamiento de A Coruña advierte de que mantiene abierta la puerta a una posible colaboración con Sogama después de la primera reunión celebrada en el mes de septiembre entre el gobierno municipal y la Xunta. El ayuntamiento incorporó así al Consorcio de las Mariñas a la Mesa de Trabajo, con personal técnico y también con los representantes designados por el organismo comarcal. Desde el gobierno municipal destacaron que en las próximas semanas habrá más reuniones donde se estudiarán todas las aportaciones que acerque el Consorcio, «que no solo es tratado como un cliente de la planta sino como un socio preferente del ayuntamiento de A Coruña», apuntan fuentes del gobierno local, que resaltan que en la reunión se constató la voluntad de ambas dos institución de caminar juntas, definiendo bien los procesos hasta llegar a cerrar el documento definitivo para la licitación de la planta.