Alfonso Rueda, presidente de la Xunta, liquidó en 24 horas su primera remodelación en el ejecutivo autonómica propiciada por la marcha del vicepresidente primero Francisco Conde, que liderará la candidatura al Congreso de los Diputados por la provincia de Lugo y orienta su futuro hacia la política nacional. Con él se va también Rosa Quintana, conselleira de Pesca, y la única integrante del gobierno gallego, además de Rueda, que formaba parte del mismo desde 2009. La marcha de Conde y Quintana cabe interpretarla como el primer movimiento para convertirse en ministros de un Gobierno dirigido por Alfonso Núñez Feijóo.
Los cambios conllevan también el ascenso de Diego Calvo, líder del PP de la provincia de A Coruña, a la vicepresidencia primera. Ángeles Vázquez, conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, será la vicepresidente segunda y crece el peso de otra coruñesa, Chus Lorenzana, que pasa de Emprego e Igualdade a dirigir Economía, Industria e Innovación.
Dos nuevos refuerzos se incorporan al equipo de Rueda. Elena Rivo, hasta ahora vicerrectora en el campus de Ourense, se hace cargo de Promoción do Emprego e Igualdade mientras que la Consellería do Mar queda a cargo de Alfonso Villares, alcalde de Cervo.
La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, asegura que la remodelación de la Xunta “no está pensada en lo que necesita Galicia”, sino que está determinada por el “PP” desde Génova, lo que muestra la falta de “peso político” del presidente gallego, Alfonso Rueda. “Si no es capaz de dirigir su partido, mucho menos puede dirigir bien el rumbo de los gallegos”, explica. El portavoz socialista, Luis Álvarez, criticó que Rueda ofrece “unha mostra máis da súa debilidade”. “Non ten autoridade nin para designar ao seu vicepresidente, porque é Feijoo quen o fai”.