El entorno de la Avenida de Fisterra, Praza del Maestro Mateo y, sobre todo, la calle Fernando Macías lucía este jueves a última hora de la tarde entre tinieblas, según se puede apreciar en la foto que encabeza esta información. La situación propiciada seguramente por el apagón de una fase del alumbrado eléctrico era similar a la que se produjo hace unos días en el barrio de Atocha e inmediaciones del cuartelillo de la Policía Local. Pero en esta ocasión la ocuridad era más llamativa, si cabe, porque ocurría en horario comercial y en pleno centro de la ciudad. La estupefacción reinaba entre los viandantes.
Ocurre además que en Fernando Macías apenas hay un par de ornamentos navideños. Y ahí se puede entrar en otro lamento que ya empieza a ser un clamor entre la hostelería y el comercio coruñés, que no entiende como el ayuntamiento no pone los medios para que la iluminación que se supone por la época del año genere un ambiente que anime al tránsito y, por consiguiente, al consumo. Hay Prescos que ya están inventados hace mucho tiempo. Que la programación navideña del Concello haya obviado el puente de esta semana es otra muesca más en el desastre, un detalle llamativo cuando justo antes de estas fechas se hizo un encendido de luces a mayor gloria de los concejales que se pasearon por el estrado y se sacaron decenas de selfies.
A Coruña invierte este año algo menos de 470.000 euros en iluminación navideña, poco más de la mitad que Vigo, que invierte en ese concepto 929.000 euros. En A Coruña se cuenta este año con 2,9 millones de puntos de luz, en Vigo superan los 11 millones. Ambas ciudades contratan el servicio con la misma empresa, Ximenez Iluminación, una compañía con sede en la localidad cordobesa de Puente Genil. El término municipal coruñés tiene 37,8 kilometros cuadrados, el vigués se va hasta los 109, de manera que, si se considera el territorio a cubrir, el coste medio de la iluminación es muy inferior en Vigo.
A Coruña gasta 470.000 euros en iluminación navideña y tiene 2,9 millones de puntos de luz; Vigo paga 929.000 euros y tiene más de 11 millones de luces
Con la mitad de la inversión, A Coruña tiene cuatro veces menos luces que Vigo. Y aún así la capital herculina ha aumentado su dotación para luces navideñas respecto a lo que pagaba con el gobierno de Marea Atlántica, que con poco más de 300.000 euros redujo esa partida a algo más de la mitad de lo que se invirtió en engalanar la ciudad en el último año de Carlos Negreira al frente del ayuntamiento. El resultado es evidente. Cuando se accede a la ciudad por su entrada de Alfonso Molina, ya no digamos por As Xubias, nada advierte de las fechas navideñas. La iluminación en los barrios se reduce a algún punto testimonial y en entornos que no son comerciales. Lo ocurrido este jueves en el centro de la ciudad alerta de que no estamos sólo ante un problema periférico. “Las luces llegarán a todos los barrios”, había anunciado ya el año pasado la alcaldesa Inés Rey
Más allá de la astracanada o la anécdota (que cinco millones de visitantes acudan a Vigo en fecha navideña como ocurrió en 2019, quizás tampoco lo sea tanto), A Coruña sigue desaprovechando la Navidad para impulsar al languideciente comercio local, en una ciudad en la que más de un millar de locales comerciales permanecen cerrados, aunque algunas fuentes elevan esa cantidad hasta los 1.600.