La edad media de la población gallega continúa al alza año tras año y en la actualidad se sitúa en 47,48 años, según los datos que publica este viernes el Instituto Galego de Estatística (IGE). Mientras tanto la comunidad continúa inmersa en un proceso de reducción de las tasas de natalidad y fecundidad. El índice sintético de fecundidad o número medio de hijos por mujer -que se obtiene como la suma de las tasas específicas de fecundidad de las mujeres en edad fértil, de 15 a 49 años- se cifró en 2019 en 1,02 hijos por mujer.
La edad media a la maternidad -media aritmética de las edades a las que las mujeres tienen hijos, ponderada por las tasas específicas de fecundidad de cada grupo de edad- se situó en 2019 en 32,81 años. La edad media a la paternidad estuvo por encima, en 35,44 años.
Los datos alertan de que disminuye en la comunidad el peso de los grupos de individuos de menos de 20 años y de entre 20 y 64 años, y se incrementa el de 65 y más años.
El índice de envejecimiento, que calcula el número de personas de 65 años o más por cada cien menores de 20 años, sube desde 1975 a un ritmo superior en el caso de las mujeres. Para el conjunto de Galicia, se sitúa ahora en 160,4, lo cual significa que por cada cien menores de 20 años se contabilizaron más de 160 mayores de 65 años. Las previsiones para los próximos diez años no son nada halagüeñas. En 2031, por cada menor de veinte años habrá 2,3 jubilados.
Por su parte, el índice de sobreenvejecimiento muestra cómo está estructurado el grupo de 65 o más años al calcular qué porcentaje representa la población de 85 o más años sobre el grupo de 65 o más. En el año 2020, se fijó en el 19,15%.
En cuanto a la tasa bruta de mortalidad, en 2019 tomó el valor de 11,57 defunciones por cada 1.000 habitantes. La esperanza de vida al nacer alcanzó los 83,82 años. Por otra parte, la tasa bruta de nupcialidad se sitúa en 3,45 matrimonios por cada 1.000 habitantes en 2019 y en Galicia se produjeron ese año 1,72 divorcios por cada 1.000 habitante