Ocurre desde que en las autonómicas de 2009 un total de 57.812 coruñeses le dieron su voto. En realidad era Carlos Negreira el que encabezaba la lista por la provincia, pero Alberto Núñez Feijóo era el cartel electoral a la presidencia de la Xunta. Hace 14 años y desde entonces en todos los comicios en los que estuvo involucrado el ahora candidato del PP a la presidencia del Gobierno se saldaron con un rotundo triunfo en A Coruña. Volvió a ocurrir este domingo. 57.356 votantes depositaron una papeleta del Partido Popular en las urnas dispuestas en 295 mesas distribuidas por la ciudad, más de 15.000 votos que los que cosechó Miguel Lorenzo en las elecciones municipales celebrados hace menos de dos meses. Porcentualmente el crecimiento fue de algo más de tres puntos.
El verano no arredró a los coruñeses, que acudieron masivamente a las urnas. La abstención se quedó en el 26,6%, quince puntos menos que en los recientes comicios municipales, detalle que alerta sobre el desapego de un sector de la ciudadanía sobre los asuntos que se debaten en María Pita, quizás sobre los actores. Núñez Feijóo apuntó incluso en el fragor de la noche electoral que intentará que nunca más se vuelva a votar en el mes de julio, pero al menos en A Coruña la participación en esta ocasión alcanzó tintes históricos, apenas a un punto del 74,3% de votantes que acudieron a las urnas en las generales de 2015. Entonces, con aquel aluvión de participación el PP obtuvo en la ciudad 46.705 votos, poco menos de mil más que Podemos. Los socialistas, en los que Pedro Sánchez se estrenaba como candidato a la presidencia, se quedaron en 28.927. Este domingo llegaron a los 44.620 apoyos.
Los resultados evidenciaron también el desastre de la Marea Atlántica en A Coruña, de la marca y de la incapacidad para formar un frente común que concurriese a las urnas. Los 10.431 votos que hubieran sumado las candidaturas encabezadas respectivamente por Xan Xove y José Manuel Sande se multiplicaron casi por dos en el proyecto Sumar que, con una candidata compostelana y una cabeza de lista nacional ferrolana, recibió en A Coruña 20.089 votos.
En un escenario en el que acudieron a los colegios electorales 24.000 coruñeses más que hace dos meses, los socialista también aumentaron sus apoyos, pero porcentualmente se quedaron un poco por debajo de los resultados cosechados por Inés Rey, a la que apoyaron el 31,35% de las personas que ejercieron su derecho a voto. La lista encabezada por el ministro José Miiñones se quedó este domingo en el 31,03%.
La extrapolación de los resultados de las elecciones generales a unas supuestas municipales no ofrece muchos cambios. El PP se quedaría en 12 ediles, pero los socialistas bajarían de 11 a 9, perjudicados por el ascenso de Sumar (que lograría 4 hipotéticos concejales). El BNG pasaría de 4 a 2. Es la única de las principales fuerzas políticas que en la ciudad ha bajado en número de votos respecto a la llamada a las urnas del pasado 28 de mayo. Vox subió de 4.528 apoyos a 6.924, pero se mantiene por debajo del 5%. Y, como ocurría hace dos meses, ni siquiera llevando todos sus votos al PP sería suficiente para darle a la derecha la alcaldía en A Coruña, ciudad en la que este domingo sumaron entre ambas fuerzas 63.999 votos mientras las tres fuerzas mayoritarias de izquierda se dispararon hasta los 77.074