Miguel Lorenzo, senador por A Coruña, pilotó la aprobación de nada menos que 17 enmiendas presentadas por el Partido Popular en el Senado para mejorar de manera sustancial tanto el Proyecto de Ley de medidas de apoyo al sector cultural como articular iniciativas de carácter tributario para que empresas y trabajadores del sector puedan hacer frente al impacto de la pandemia.
Los senadores socialistas y los adscritos a Podemos votaron en contra de unas soluciones que, como recordó Lorenzo, recogen muchas de las reivindicaciones del sector. “¿Cómo van a explicar los socialistas y sus socios de Gobierno su voto en contra a unas medidas tan importantes para los profesionales del ámbito cultural?”, se preguntó el senador coruñés desde el estrado de la Cámara Alta. Ahora espera que los partidos en el Gobierno apoyen las modificaciones en el trámite que marca el regreso de la Ley al Congreso de los Diputados para que pueda promulgarse.
Las apreciaciones que expuso Lorenzo le dieron la vuelta a la mayoría habitual en el Senado. Persuadió a parlamentarios de otros grupos, alejados ideológicamente del PP, de que era preciso dar respuesta a un sector “que lleva tres años esperando” por no haberse desarrollado el Estatuto del Artista. “Llevamos tres ministros en tres años y no han hecho nada. El Gobierno no tiene credibilidad en el sector de la cultura”, lamentó el senador coruñés, que explicó que en la tramitación del Proyecto de Ley se ha confundido la urgencia con las prisas y reivindicó la necesidad de atender a las personas, “a los artistas, trabajadores, técnicos que están detrás de los escenarios, pymes y autónomos culturales a los que durante meses nadie atendió”.
Entre las enmiendas aprobadas destaca una que reclama al Gobierno la elaboración de un Plan Nacional de fomento de consumo cultural. También se aprobó otra iniciativa presentada por el portavoz de Cultura del Grupo Popular en el Senado que aumenta hasta los 3,75 millones de euros la ayuda a la Sociedad de Garantía Recíproca para la financiar el coste de la comisión de apertura de los avales de los préstamos y pólizas de crédito a empresas del sector cultural.
Además, se aprobó subir al 2% el porcentaje de la obra pública para cultura, conservación o enriquecimiento del patrimonio histórico o fomento de la actividad artística; y se ha aprobado también una propuesta presentada que fomenta ayudas a librerías y editoriales a través de bono libro o la compra de ejemplares para bibliotecas por parte del Ministerio de Cultura.
El Grupo Popular en el Senado también consiguió que se aprobase una mejora de las indemnizaciones en caso de cancelación o suspensión de contratos con la administración, así como una serie de ayudas extraordinarias para la digitalización e innovación de las industrias culturales, la actividad museística y mantenimiento patrimonial y la conservación del patrimonio histórico.
Las enmiendas defendidas por Miguel Lorenzo y aprobadas por la mayoría de senadores recogen también la concesión de la prestación extraordinaria por cese de la actividad para los trabajadores autónomos y los administradores de entidades mercantiles del sector cultural; la creación de un fondo de indemnización para los rodajes cinematográficos para posibles suspensiones por causa de la covid-19. Destinan, además, el 1% de obra pública para fomento de creatividad artística o compra o encargo a autores vivos.
Por último, salieron adelante las enmiendas que reclaman que la cultura y el libro sean considerados un “bien básico de primera necesidad”; que el certificado de nacionalidad y el certificado de carácter cultural sean vinculantes para la concesión de incentivos fiscales por parte de la administración tributaria; y la modificación del artículo 25.3 de la Ley de Propiedad Intelectual, que hace referencia a la compensación equitativa por copia privada.