La Policía Judicial portuguesa mantiene abierta una investigación contra la evasión fiscal que el diario luso Correio da Manha califica como «una de las operaciones más grandes jamás realizadas por las autoridades portuguesas, en colaboración con investigadores europeos». Las pesquisas afectan, según apunta el rotativo portugués a la entidad bancaria Abanca y en concreto a su sede en Oporto «por donde pasarían muchos de estos millones que deberían revertir a las arcas del Estado», informa el periódico luso.
Se trata de un esquema de evasión de impuestos a través de un entramado de empresas ficticias. El fraude encontrado en Portugal supera los 300 millones, y en Europa -están en marcha búsquedas en ocho países más- el fraude supera los 1.000 millones. En Portugal están previstas más de un centenar de registros en entidades ubicadas, en Oporto, Santarém, Figueira da Foz, Coimbra, Gaia, Guimarães y Braga.
El juez Pedro Miguel Vieira, del Juzgado de Instrucción Penal de Oporto, dirige la operación en la que están previstas ,al menos de momento, 15 detenciones.
Abanca terminó el mes pasado la integración del negocio del portugués Novo Banco con el traspaso de la actividad operativa. El proceso ha implicado la migración de 260.929 contratos y ahora los clientes del portugués Novo Banco pueden operar con total normalidad, tanto de manera presencial en la red de oficinas de Abanca, como a través de sus canales de banca a distancia.