ACLARACIÓN: Por error diSÍnoticias publicó en principio una información en la que se aludía a que el Deportivo no iba a asistir a una reunión en la sede de la Federación Española de Fútbol con la elección de la sede de la final four de la Copa del Rey sobre la mesa. En realidad, el motivo de la reunión (que tuvo lugar el martes) tenía que ver con la elección de las sedes del Mundial 2030. En efecto el Deportivo, cuyas relaciones con el Concello no atraviesan por su mejor momento, no asistió a la cita porque no había acceso telemático.
Que las relaciones institucionales en el Deportivo son mejorables es algo sabido desde hace años. Ni siquiera el terrible choque con Javier Tebas a cuenta del Fuenlabradagate sirvió para estrechar posturas con una Federación Española que no pierde ocasión de humillar al que debería ser el equipo estrella de sus competiciones.
El último desencuentrro tiene que ver con el equipo juvenil y su participación en la final a cuatro de la Copa del Rey. Nada más acabar la prórroga en tierras castellonenses, desde el gabinete de la alcaldesa, Inés Rey, se dirigieron a un alto empleado de la Federación Gallega de Fútbol para saber cuáles eran los requisitos para albergar en el segundo fin de semana de marzo (las semifinales se juegan el miércoles 8 y la final el domingo 12) un campeonato que moviliza a más de un millar de personas y con un bien ganado prestigio en el mundo del fútbol. Además, su coste, muy por debajo de los cien mil euros, ofrece un interesante retorno económico a la ciudad organizadora.
Aunque no hubo respuesta oficial por parte de los federativos, extraoficialmente se dio a entender a los enviados municipales que no había ningún interés por parte del Dépor de solicitar la organización de un evento que debería ser obligado en la supuesta apuesta por la cantera de la entidad blanquiazul. La celebración de un partido de Liga del primer equipo contra el Real Madrid Castilla fue la excusa esgrimida por un Villasuso cada vez más alejado de la realidad y aislado en la burbuja que ha construido a su alrededor Albert Gil, uno de los personajes más curiosos de la órbita deportivista.
Así, el Ayuntamiento se dirigió directamente a las dos personas con las que tiene más contacto debido a las negociaciones para la candidatura de sede para el Mundial 2030 y enseguida se encontró con la mayor de las receptividades desde el organismo que preside Luis Rubiales. En María Pita interpretan la filtración de la maniobra municipal para conseguir ser sede de la final four de la Copa del Rey juvenil como una sucia estratagema que oculta su total inacción.
Así que mucha suerte a Manuel Pablo y sus muchachos y que el talento les acompañe, porque la fuerza de su directiva parece que seguirá de laconada una temporada.