El juzgado de lo contencioso-administrativo número 2 de A Coruña ha tramitado la suspensión cautelar de la adjudicación del contrato del servicio de recogida y gestión del centro municipal de animales, que otorgó a Servigal, y requiere al Ayuntamiento coruñés que aporte la documentación requerida. Según un auto del pasado 27 de julio se ordena la tramitación del incidente cautelar y se le da un plazo de diez días al Ayuntamiento de A Coruña para que presente la documentación requerida sobre este asunto.
La adjudicación del contrato de la perrera, ubicada en Bens, a Servigal, que ya desarrollaba esta actividad desde 2005, se aprobó el pasado 26 de mayo por un periodo de cinco años. La empresa Más Cuidados, que interpuso el recurso contencioso-administrativo, ha explicado en un comunicado que la aprobación de las medidas cautelares solicitadas “implicaría la suspensión del acuerdo” de la Junta de Gobierno Local.
Más Cuidados ha detallado que inició el proceso de reclamación judicial al “percibir irregularidades probadas en la adjudicación de la concesión”, como que esta empresa presentó “una propuesta más ventajosa” que Servigal, a la que acusa también de cometer “infracciones e incumplimientos contractuales”. “La licitación fue realizada sobre una puntuación máxima de 100 puntos, siendo 51 de ellos relativos a criterios objetivos (valoración económica), en los que Más Cuidados
presentó una propuesta más ventajosa que Servigal”, asegura la empresa, que recalca además que “la generosa valoración de los criterios subjetivos o sujetos a juicio de valor resultan cuando menos sospechosos”.
Según recoge Quincemil la empresa Servigal había ganado también un contrato a finales del año pasado para llevar a cabo el servicio de residencia de animales y esterilización de animales domésticos, con un coste para el ayuntamiento de 160.000 euros al año, IVA incluido. El nuevo contrato unifica ambos, que sumaban por separado un gasto de 337.477,49 euros (IVA incluido) para las arcas municipales. Ahora el ayuntamiento abona 477.708 euros anuales a Servigal, lo que supone un incremento del 32,7% respecto a lo que sumaban los dos contratos por separado.
El colectivo animalista Libera había presentado hace tres años 46.000 firmas para que el ayuntamiento asumiese la gestión de la perrera municipal. Lo hicieron un año antes de que la concesión a Servigal finalizase.