No es nada nuevo el abandono al que los barrios de A Coruña han sido sometidos en los últimos años. La sensación de dejadez por parte del Concello es algo extendido entre vecinos de todas las zonas de la ciudad, como han expresado recientemente los usuarios del parque de A Sardiñeira.
En 2021 se unieron para presentar una propuesta de reforma del parque, solicitando más área de suelo acolchado – el centro del parque es de hierba y tierra – y más juegos infantiles para niños y niñas de diferentes edades.
Y el esfuerzo dio sus frutos. O eso creían ellos. El proyecto fue uno de los elegidos por el Concello, con un coste de 100.000 euros que recogía «a mellora tanto da calidade do servizo do parque infantil como da cantidade de xogos infantís existentes na praza, ao ampliarse a área de xogo e implantántose, na zona central do novo pavimento amortiguador, unha nova estrutura que cobre o rango de idade dos usuarios e alta simultaneidade no seu uso».
Esa fue la respuesta del gobierno municipal, recibida con satisfacción por los vecinos. Pero en eso se quedó. En una respuesta por escrito. Porque más de un año después, el parque no sólo sigue igual, sino que ha empeorado por la falta de reformas… y de mantenimiento.
La desatención llega hasta tal punto en el parque de A Sardiñeira que los vecinos han quedado incluso sin agua: «Llamamos para que restauraran el agua. La pusieron, pero la fuente está rota. En vez de arreglar la fuente, volvieron a cerrar el agua», apunta una de las usuarias en las redes sociales».