No ha sido A Coruña una ciudad especialmente beneficiada por los Presupuestos Generales del Estado que el gobierno estatal acaba de aprobar. Inés Rey no ha conseguido que el PSOE tuviera en consideración las necesidades de la localidad herculina y desde el grupo municipal del Partido Popular se insta a la alcaldesa a presentar enmiendas de unas partidas a todas luces escasas “para inversiones e infraestructuras importantes en tierra, mar y aire”.
A nivel de carreteras y movilidad, la inversión para Vial 18, la ampliación del Pasaje, la remodelación de Alfonso Molina y la Cuarta Ronda se queda en 18 millones de euros, una reducción del 70 por ciento con respecto a los presupuestados por el PP en 2018. Las obras en la Cuarta Ronda apuntan a sumarse a la lista de promesas incumplidas por parte de Inés Rey, ya que sólo aparecen destinados unos insuficientes 500.000 euros para tal fin.
En cuanto a Alfonso Molina, se maquilla el presupuesto con 16 millones, pero que serán en diferido. Sólo 1 millón llegará en el próximo ejercicio, dejando hasta un total de 11 millones para el año 2026, lo que evidencia un retraso considerable en la ejecución.
Igual de abandonado queda Alvedro, para el que no se incluye ninguna partida destinada a la remodelación de la terminal de pasajeros ni para el demandado tercer finger. Los menos de 2 millones irán destinados al trabajo de mantenimiento habitual mientras el aeropuerto sigue perdiendo destinos y frecuencias.
Y es que ni siquiera en la mayor inversión de los Presupuestos Generales en A Coruña ha tenido participación el PSOE local. Se trata de la partida destinada al puerto con el tren a Langosteira, conseguida por el anterior presidente de la Xunta, Núñez Feijóo, en sus reuniones con el entonces ministro de Trasportes. En este sentido, se echa en falta que la alcaldesa no haya logrado la condonación de la deuda del propio puerto, como sí se hizo con el de Valencia.