A Coruña cerró 2022 como la ciudad más insegura de Galicia y con peores datos entre las de su tamaño en el resto del Estado. Lamentablemente, 2023 no ha cambiado esa tendencia e incluso la ha incrementado, con diferentes incidentes en las últimas semanas que han puesto en alerta y elevado la preocupación de vecinos y comerciantes de los diferentes barrios de la localidad.
El trabajo que se está haciendo desde el Concello es insuficiente y por eso Miguel Lorenzo, candidato del PP a la alcaldía, le ha solicitado públicamente a Inés Rey la convocatoria de la Junta Local de Seguridad para tratar de reevaluar la situación, actualizar el Plan Local de Seguridad e incrementar la presencia de fuerzas de seguridad en las calles.
Lorenzo acudió este lunes a la Avenida de Oza, donde se había producido un incendio en un piso okupado que los vecinos tienen identificado como narcopiso. No es el único y precisamente los residentes señalan esta problemática como el origen de los diferentes hechos delictivos que están ocurriendo en la zona.
Se sienten inseguros en sus propios barrios. En las calles, pero también los comerciantes con temor a sus establecimientos, ya que recientemente forzaron una puerta para robar en un local anexo dedicado a la venta de accesorios para teléfonos móviles.
Y es que la demostración de que no se trata de hechos aislados tuvo lugar poco después de que el popular estuviera por la zona escuchando las inquietudes de los vecinos, con un nuevo intento de atraco en un supermercado. Estos incidentes se producen prácticamente a diario.
Miguel Lorenzo lleva tiempo reclamando la necesidad de recuperar la Policía de Barrio y vuelve a insistir para que el gobierno municipal lo considere. Cree que su labor preventiva de vigilancia es clave, como también lo es incrementar el número de agentes de Policía Local y de Policía Nacional.