Los vecinos de A Coruña pagarán a su ayuntamiento 66 millones de euros de más a consecuencia de las subidas que ha experimentado el Impuesto de Bienes Inmuebles entre 2016 y 2024. “Estamos abonando un 18% por encima de lo que debemos”, estima Miguel Lorenzo, líder de la oposición en el ayuntamiento herculino, que clama ante la anunciada subida de impuestos en el municipio. “Estamos ante la segunda subida de IBI de Inés Rey: 3% en 2019 y 5% ahora, en vez de bajarlo un 10% como permite la ley desde 2015”, advierte
El IBI es un impuesto directo que grava la titularidad y otros derechos reales de los inmuebles pertenecientes a un término municipal, ya sean rústicos, urbanos o de características especiales. Este tributo lo cobran los ayuntamientos de forma anual a todo aquel que es dueño de algún inmueble, simplemente por su mera tenencia. De hecho se trata de un impuesto que representa una de las vías por las que las administraciones locales perciben los mayores ingresos. “En el expediente del IBI que aprobaron en Junta de Gobierno y que va a Pleno, el Gobierno municipal afirma en varios párrafos que la subida es del 3%, cuando es de un 5% porque el tipo impositivo pasa de 0,60 a 0,63. O mienten o tienen que retirar y corregir este expediente”, denuncia Lorenzo.
Durante la pasada campaña electoral Inés Rey aseguró que si seguía como alcaldesa estaba estudiando subir el IBI a las viviendas vacías en la ciudad. Al final lo que hay es una tabla rasa: pagan todos mientras el gobierno municipal no es capaz ni de ejecutar su presupuesto ni, apunta Lorenzo, de tampoco recaudar lo que tenía previsto. “Para 2022 presupuestaron ingresar 310 millones de euros y recaudaron 254 ¿Por qué no mejoran la gestión municipal para recaudar lo que prevén en vez de subir los impuestos? Inés Rey quiere que los coruñeses paguen su incapacidad para recaudar lo que presupuesta”, denuncia.