Los presidentes de los puertos de A Coruña y Leixões han abogado por incentivar la cooperación para aumentar su actividad y avanzar en la transición energética y la descarbonización, intercambiando experiencias a este respecto. Así lo han expuesto antes de intervenir en el IV Foro Diálogos Gallaecia sobre el presente y futuro de los puertos en el espacio galaico-portugués.
El presidente del organismo portuario coruñés, Martín Fernández Prado, ha insistido en que ya existe esta coordinación con este y otros puertos. En el caso del portugués, Nuno Araújo, ha remarcado que se ha trabajado en el fomento del tráfico de cruceros «y ahora en la descarbonización y energética» por la experiencia de este último a este respecto. Ambos participaron en un coloquio en el que intervino también Fernando González Laxe, ex presidente de Puertos del Estado.
Los tres expertos centraron sus intervenciones en los grandes retos de futuro que afrontan los puertos en el contexto actual, ante los cambios no solo evidenciados en la pandemia sino también por la necesidad de caminar hacia la sostenibilidad como factor competitivo de primer orden en la captación de negocio. Precisamente, los presidentes de las autoridades portuarias de A Coruña y Leixoes aprovecharon este foro para anunciar la próxima firma de un convenio entre ambos, para desarrollar acciones conjuntas y generar alianzas estratégicas en el ámbito de la descarbonización de la industria y la transición energética. Así lo señaló Fernández Prado, recordando que ya existen experiencias previas de estrecha colaboración con acuerdos como el vinculado al tráfico de cruceros, que ha resultado fundamental para captar escalas en ambos puertos y situar A Coruña como líder del noroeste peninsular, con una previsión récord de 170 escalas este año.
Por su parte, el presidente del Puerto de Leixoes hizo alusión a la necesidad de cooperar entre dos puertos tan estratégicos del noroeste, ya que es el único modo de afrontar los enormes desafíos a los que se enfrentan. “Debemos construir en conjunto, mejorar nuestra capacidad de respuesta frente al mercado y atender a las demandas y necesidades de la cadena logística”, indicó. En la misma línea se expresó Fernández Prado, que recordó que ambos dirigentes portuarios tienen una visión muy similar, añadiendo que “el escenario no es solo Galicia y Portugal, jugamos en la liga europea y con competencias mundiales”. En este sentido, añadió que la Eurorregión, formada por Galicia, norte de Portugal y parte de Asturias y León, suma 6 millones de habitantes y ese es el escenario en el que hay que centrarse.
González Laxe coincidió con ambos dirigentes en que los puertos deben ser competitivos, pero también complementarios, y apostó por que la cooperación de la Eurorregión sea una de las grandes imágenes de marca de los puertos de la cornisa noroeste para pugnar en un mercado tan concentrado en alianzas comerciales de grandes compañías. También aplaudió la estrategia de ambos puertos en el marco de la sostenibilidad, ya que, tal como sostienen ambos presidentes, las pautas que están marcando el crecimiento de los puertos son la especialización y el desempeño medioambiental.
En esta línea, Fernández Prado señaló que hay empresas que han elegido el Puerto de A Coruña por su proyecto Green Port de energía verde y descarbonización, que incluye la previsión de que el Puerto Exterior sea autosuficiente energéticamente en dos años y constituya además un motor para la transición energética de las empresas de su entorno. De hecho, avanzó que la Autoridad Portuaria está creando una empresa de gestión y comercialización de energía eléctrica con fuentes renovables, para ofrecerles la energía lo más barata posible a las empresas, contribuyendo a su mayor eficiencia. También están trabajando en el suministro de agua sostenible, un asunto del que se habla menos pero que es fundamental para puertos y hinterlands muy industriales, como es el caso de A Coruña.
Para Fernández Prado, la transición ecológica se debe extrapolar también a la adaptación a un nuevo contexto en cuanto a los tráficos energéticos, de manera que el Puerto de A Coruña siga siendo un referente en movimiento de otro tipo de energías como el hidrógeno y el amonio, cuyas plantas de producción denominó como “las nuevas refinerías del siglo XXI”. Al mismo tiempo, su objetivo es acompañar a Repsol en su apuesta por la transformación hacia los biocombustibles.
A la hora de asumir esos desafíos, el presidente de la Autoridad Portuaria indicó que “es imprescindible el tren”, que también resulta una prioridad en la mejora competitiva del puerto de Leixoes, tal como aseguró su presidente. Fernández Prado reiteró que “un puerto sin tren es como un Fórmula 1 sin ruedas”, para reiterar su satisfacción por el anuncio de la licitación en febrero del enlace ferroviario a Langosteira, realizado el pasado viernes tras una reunión del presidente de la Xunta con la ministra de Transportes.
González Laxe añadía otro símil para destacar la importancia del tren, indicando que “es el oxígeno de un puerto”, mientras que “el puerto es la savia del ferrocarril”, haciendo alusión a una intermodalidad que el presidente del Puerto de A Coruña considera imprescindible para crecer, al igual que la especialización como hub de mercancías como los graneles agroalimentarios, en los que A Coruña es líder dando entrada al 75% de los productos que alimentan a la cabaña ganadera gallega.