La cifra de delitos se dispara en A Coruña, según los datos del Gobierno central. Si hasta 2020 la estadística mostraba que la ciudad estaba por debajo de la media nacional, a día de hoy la supera en un 17,4% mientras la mayoría de tipos delictivos se disparan. No hay fin de semana sin problemas. El último, en un barrio residencial como Os Rosales que otrora era una balsa de aceite, las fiestas acabaron con el balance de un apuñalamiento una agresión homófoba, varios robos en vehículos, pinchazos de ruedas y un intento de allanamiento.
En noviembre de 2021 los datos recogidos en la memorias y la web del Ministerio del Interior no dejaba lugar a dudas. A Coruña había registrado en los nueve primeros meses del año un 30% más de delitos que en el mismo período del ejercicio anterior, mientras que la subida media en España fue del 8,5%. En A Coruña aumentaban los delitos más del triple que la media nacional mientras su alcaldesa, Inés Rey, hablaba de “una ciudad segura” con índices de criminalidad “muy bajos”. En esa línea se mantuvo en un Pleno Extraordinario en el que no sólo ella negó la mayor y en el que se rechazó recuperar la policía de barrio. La concejal de Podemos, Isabel Faraldo, llegó a aludir a una “percepción subxectiva” de los ciudadanos y a “campañas de prensa e algún tipo de interés partidista que confunde delitos con conflictos cívicos”. María García, de Marea Atlántica, pidió que se actuase con perspectiva “integral”.
Entre tanta charleta los problemas no dejaron de asolar la ciudad. Y mientras quienes deben hacerlo se deciden a intentar, y sobre todo a conseguir, que A Coruña vuelva a ser una ciudad segura y en definitiva un buen sitio para vivir o instalar un negocio, el ministerio del Interior saca a relucir el muestreo del primer trimestre del año. Los datos revelan que la ciudad va a peor. Las infracciones penales han crecido en ese tiempo un 34% respecto al año anterior.
- Los robos a domicilios o establecimientos pasaron de 60 a 135. Crecieron un 125%. Sólo en viviendas la subida fue de 35 a 83 delitos, un 137%.
- Los robos con fuerza ascendieron a 135, registrados por la Policía Nacional, y crecieron un 125%.
- Los hurtos en los tres primeros meses de este año fueron 1.050. En el mismo periodo del año anterior habían sido 674. Crecieron un 55% y se supera la media nacional en casi el 40%. En España se registran poco más de 300 hurtos por cada 100.000 habitantes. En A Coruña esa tasa se dispara hasta los 428.
- Las agresiones o riñas tumultuarias aumentaron un 57%
- Los delitos de tráfico de drogas crecieron un 57%
- Los intentos de homicidio pasaron de 0 a 7.
En febrero de este año la concejalía de Seguridad Ciudadana, con Juan Ignacio Borrego al frente, ya asumió que la situación era preocupante. “Estamos traballando en coordinación permanente coa Delegación do Goberno”, explicó. Meses antes había atribuido el aumento de la criminalidad en la ciudad a “delitos informáticos».
El Ayuntamiento de A Coruña había situado como jefa de servicio de Seguridad Ciudadana a Montserrat Paz, una psicóloga que trabajaba en la cárcel de Teixeiro y que habí formado parte la lista de Inés Rey en las elecciones municipales de 2019 y también la encabezada por Mar Barcón en 2015. Un juzgado echó por tierra el nombramiento y el magistrado fue taxativo en la sentencia: “Este juzgador no alcanza a comprender qué relación tiene el trabajo que se desempeña como psicólogo en un CIP con la seguridad ciudadana”, fundamentaba. Y además apuntó: “Sorprendentemente cuando se valora a la candidata finalmente elegida no se toma en consideración la ausencia de experiencia en seguridad ciudadana”. Seis personas, alguna de ellas de amplia experiencia en materia de seguridad, se presentaron al puesto que se adjudicó a Paz.
Mientras tanto, los índices de delitos no dejan de crecer en A Coruña. Quizás sea el precio a pagar por una política errática que restó importancia a lo más esencial: garantizar que A Coruña sea un buen lugar para vivir.