No hace ni un año que García Patiño se hizo a un lado y presentó la dimisión como alcalde de Cambre, pero el Concello está teniendo más dificultades de las esperadas para escapar de su larga sombra y ahora se ve envuelto en una nueva investigación de la Fiscalía por posible delito de prevaricación.
Mientras continúa el proceso en el Juzgado número 5 de A Coruña por presunta prevaricación y malversación por parte del exalcalde, en relación a pagos de horas extras a la Policía Local o el nombramiento del exjefe del cuerpo municipal, los focos se ponen ahora sobre su sucesora, María Pan, por el abono de facturas atrasadas recurriendo a reconocimientos extrajudiciales de crédito – cerca de 4 millones de euros -, según apunta La Opinión.
El cuestionable funcionamiento del Concello viene de lejos y han sido repetidas las ocasiones en las que el resto de grupos municipales e incluso hasta la interventora y la secretaria han informado en contra de este tipo pagos. De hecho, García Patiño señalaba a ambas como responsables de lo que él entendía como un bloqueo de la actividad municipal.
«Este modo de actuar al margen de la normativa aplicable es el causante de la situación actual con los proveedores de servicios y suministros, así como del incumplimiento del período medio de pago del Concello», apunta la propia interventora, añadiendo que no parece que haya intención de poner solución: «Lejos de actuar procediendo a regularizar la situación, mantiene la prestación de servicios en precario con la irregularidad manifiesta que tal hecho provoca».