La comisión técnica encargada de reordenar los espacios portuarios de la ciudad se juntó por primera vez este miércoles en el Palacio Municipal de María Pita. Mientras tanto, en la explanada de la plaza se agrupaban dos decenas de manifestantes para reclamar que “no se privatice” la fachada marítima de la ciudad. La alcaldesa, Inés Rey, es taxativa y asegura que los terrenos portuarios no están en venta, por lo que no acepta la propuesta de la Xunta de quedarse con la titularidad del 51% de los muelles de Batería y Calvo Sotelo: “El puerto es de los coruñeses y lo seguirá siendo mientras yo sea alcaldesa. Ellos son los que tienen que decidir sobre el futuro de la ciudad”.
La regidora insiste en que las competencias de planificación urbanística son del Ayuntamiento y “las vamos a ejercer, el futuro del puerto es el futuro de la ciudad y tenemos que diseñarlo desde la ciudad, en colaboración con las administraciones implicadas, pero no podemos empezar subastando terrenos”. Para Rey, hace falta diseñar, un convenio marco de reordenación del espacio portuario interior y crear un ente público que se encargue de su gestión. Además, anima a la Xunta a que invierta en ese entorno porque “entendemos que el que quiere el Gobierno gallego es ayudar a la ciudad, pero ayudar a la ciudad no es comprar un solar”.
La alcaldesa recuerda que lo que corresponde ahora es abrir el puerto a la ciudad en los espacios de Batería y Calvo Sotelo, ya que las concesiones de San Diego no finalizan hasta el año 2027. En este punto, se puso a disposición del Puerto de cara a coordinar la apertura y la integración de estos muelles en la ciudad para que, como el sentir mayoritario del vecindario, se vuelva a disfrutar de las instalaciones portuarias y se mejore la movilidad en la ciudad, “y para eso todas las administraciones encontrarán todo el compromiso y apoyo del Ayuntamiento”, matiza.