El PSOE, con Inés Rey como poseedora del bastón de mando, gobierna el ayuntamiento de A Coruña con una tercera parte de los concejales. Nueve ediles de los 27 en total obtuvieron en las últimas elecciones municipales. Pero entre los habitantes del Palacio de María Pita ya se debate desde hace tiempo sobre unos sorprendentes modos y maneras que remiten a los de quienes disponen de una mayoría absoluta y, sobre todo, la ejercen sin entender que intercambio de impresiones es la vía para que una ciudad pueda funcionar.
En esa línea se manifiesta Francisco Jorquera, portavoz del BNG, que cree que el origen de la inestabilidad en el ayuntamiento se debe a la falta de diálogo. Y va mas allá y cree que no sólo es un problema externo, sino interno, del propio partido socialista. El episodio ocurrido en una junta de portavoces convocada con siete minutos de antelación y a la que no acudió ningún edil socialista más allá del portavoz Lage Tuñas ejemplifica ese ordeno y mando. El Partido Popular ofreció durante la jornada nuevos detalles sobre lo sucedido en un lamentable paripé
El Grupo Popular denuncia que Inés Rey vuelve a vulnerar los derechos fundamentales de la oposición al enviar el expediente del presupuesto de 2022, casi dos mil folios, con poco más de una hora para su estudio antes de votar el dictamen en la comisión de Hacienda, convocada también de forma urgente sólo unos minutos antes de su celebración para boicotear a la oposición.
A Coruña hace dos años que dispone de prespupuestos y funciona con unas cuentas prorrogadas que impiden sacar adelante nuevas inversiones en la ciudad. La nueva estación intermodal, el CHUAC, el puerto o el largamente esperada nuevo centro de salud de Santa Lucía. Todo está paralizado en A Coruña a la espera de que el gobierno local sea capaz de presentar un presupuesto. En 2021 no lo hizo
“Inés Rey instala la dictadura en María Pita del ordeno y mando y de ocultar a la oposición todo lo relacionado con su gestión. Hasta su maestro Xulio Ferreiro era más transparente y no era precisamente un ejemplo”, afirma Rosa Gallego.
El PP saca el cronómetro y explica lo sucedido. La improvisación, buscada o no, también afectó a la comisión de Hacienda que debía debatir sobre los presupuestos que tratan de sacar adelante PSOE y Marea Atlántica, que ya disponen entre ellos de mayoría para aprobarlos: “En un intento de tapar la dimisión de Juan Díaz Villoslada ha sacado el espíritu dictatorial de la alcaldesa, quien, desnortada y a la deriva, convocó de forma urgente la Junta de Gobierno para aprobar el presupuesto a las 11:53 horas para su celebración a las 12 y a continuación la comisión de Hacienda también de carácter urgente a las 13:04 horas para su celebración a las 13:30 horas.
“En la Junta solo vota el Gobierno, pero en la comisión votamos todos los grupos y sólo hemos tenido poco más de una hora para estudiar un expediente del volumen y la importancia de un presupuesto. Nos enviaron la documentación a las 12 para votar en comisión a las 13:30. Es un escándalo propio de dictaduras o de gobiernos, como es el de Inés Rey, sin rumbo ni dirección que están desbordados por las guerras internas y la incapacidad para gestionar la ciudad”, señaló la portavoz popular.
Rosa Gallego acudió a la comisión y pidió la anulación de la misma o la retirada del presupuesto para su convocatoria ordinaria al no tener tiempo para estudiar el expediente. Al negarse el presidente de la misma, el concejal de Hacienda Lage Tuñas, la portavoz del Grupo Popular manifestó su decisión de no votar el dictamen por no haber podido analizar los casi dos mil folios de la documentación.