El alza de los impuestos municipales en A Coruña se entiende con un dato: 17 de las tasas a través de las que recauda fondos el ayuntamiento han subido el 3% (tras intentar que fuese el 5%). El salario de la alcaldesa Inés Rey lo ha hecho en un 8,6% desde que en 2019 agarró el bastón de mando. Y las subidas no cesan: este jueves se aprobará la subida del recibo del agua, que se incrementará en un 3,5% gracias a los votos del PSdeG y BNG. El Partido Popular, a través de su portavoz Miguel Lorenzo, ha anunciado que votará en contra de la medida.
La oposición a Inés Rey justifica su postura: “Este incremento del recibo del agua se une a la subida generalizada de impuestos municipales de un 3% para 2024 indiscriminada, injusta e innecesaria, cuando no recaudan lo que presupuestan en ingresos (ingresaron 56 millones de euros menos de lo previsto en 2022), no ejecutan lo recaudado (en 2022 gastaron 12 millones menos de lo ingresado) por lo que no es preciso subir impuestos para mejorar servicios que no se ofrecen”, explican.
El alza en esa presión a los ciudadanos incluye también el impuesto de circulación, que según la asociación Automovilistas Europeos Asociados sitúa a A Coruña entre las que más recauda por ese concepto. Un coruñés paga más que un ciudadano de Madrid. El impuesto medra, pero el acceso y los espacios para vehículos en la ciudad disminuyen.
“Tenemos un Gobierno municipal que se llama progresista y que sube todos los impuestos a todos los coruñeses incluidos pensionistas, jóvenes, parados y dependientes. Es lamentable que los suba un Gobierno que no ejecuta el presupuesto, ya que en el anterior mandato dejaron 180 millones para obras en los barrios sin gastar “, concluye la oposición a Rey.