Los 132 nuevos positivos por covid-19 confirmados este sábado consolidan la llanura con muy leves altibajos en la que se asienta la comunidad gallega desde el final de la tercera ola. Galicia pasa de 30,9 a 29,5 positivos por cada 100.000 habitantes a la semana. Es la mejor incidencia acumulada semanal desde el pasado 29 de abril y se aproxima al ratio de 25 positivos por 100.000 habitantes que situarían a la comunidad en riesgo bajo.
Abriendo el foco a dos semanas, la incidencia acumulada a 14 días aumenta, pero muy poco, solo medio punto, de 64,7 a 65,2. Es la segunda vez en esta semana que repunta este indicador. Sin embargo, son repuntes muy tímidos, la tendencia general sigue siendo una planicie. Además, como el doble de la incidencia semanal (59) es menor que la incidencia bisemanal (65,2), sabemos que la última semana fue mejor, con menos positivos, que la penúltima.
La tasa de positividad de ayer fue del 2,3 %, lo que ayuda a bajar la media semanal del 2,1% al 2%. Es el mejor valor desde el 16 de mayo dentro de una calma casi absoluta, pues este indicador lleva moviéndose en un estrecho margen, entre el 1,9% y el 2,8% desde el 7 de marzo.
Cualquier media semanal por debajo del 4% pone a Galicia en el mejor de los niveles posibles, según los criterios del semáforo de alertas para el indicador de la media semanal de la tasa de positividad. Galicia no sale de este excelente nivel desde el 19 de marzo.
El conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, explica que la vacunación de los menores de 50 años dará comienzo el próximo 7 de junio con carácter general, aunque ha indicado que en algunas áreas sanitarias podrá adelantarse a la próxima semana. También avanza que se prevé que se reciban 75.000 dosis de la vacuna de AstraZeneca durante la próxima semana, por lo que se garantiza las de las personas de menos de 60 años que recibieron el primer pinchazo con la misma.
La Consellería de Sanidade prevé implantar un sistema para permitir programar la fecha de la vacunación tras finalizar la administración de dosis al grupo de edad comprendido entre 40 y 49 años y ha cifrado en más de un 80% las personas menores de 60 años que han optado por completar la pauta con el fármaco de AstraZeneca tras recibir el primer pinchazo con la misma