La Asociación Ecologista Arco Iris de A Coruña acusa al gobierno local de Inñes Rey herculina de llevar a cabo una política de movilidad destinada a vaciar las calles para llenar los aparcamientos subterráneos. Los ecologistas apuntan al portavoz del gobierno local, José Manuel Lage Tuñas, como «autor intelectual de un plan camuflado como aceleramiento de la peatonalización envuelto en un celofán verde» y sostienen que estamos ante un proyecto que «tiene exclusivamente un fin especulativo y atenta contra una armonización equilibrada del tráfico y las zonas verdes en la ciudad».
«El objetivo es eliminar exclusivamente plazas de residentes, las únicas que servirían para llenar unos aparcamientos deficitarios y con serios problemas de mantenimiento. Por supuesto, a costa del bolsillo de muchos coruñeses, que se verían obligados a desembolsar cantidades impensables para aparcar», aseguran los ecologistas, que entran en detalles: «Resulta llamativo que el ayuntamiento haya filtrado que hasta siete parkings tengan problemas con su concesionaria municipal, lo que estaría gestando una rápida intervención por medio de la empresa EMVSA, que sería el brazo ejecutor del plan de Lage Tuñas. Las concesionarias obtendrían una liquidez de la que ahora carecen gracias al mercadeo de plazas para residentes damnificados. A su vez, el propio ayuntamiento llevaría una comisión en toda la operación mientras mantendría en servicio a la actual empresa de la ORA, que tiene derecho a mantener un número mínimo de plazas azules para garantizar su rentabilidad».
La implantación de planes de desvío de coches hacia parkings privados ha sido implantada en Madrid, con resultados más que discutibles, ya que ha generado un uso fraudulento de las plazas adjudicadas. «Por todo ello, Arco Iros insta a Inés Rey a explicar donde van a meter los coches expulsados de las zonas verdes y por qué (a tres meses de que finalice el plazo) aún no hayan aprobado las zonas de bajas emisiones, de obligada implantación».
Estas zonas, de las que Arco Iris había propuesto que la primera se aprobara en Cuatro Caminos, serían -según explican los ecologistas- una pieza fundamental para diseñar una política de movilidad adecuada. «Sin embargo, en este caso, el orden de los factores va a cambiar el resultado. Dejar a las zonas de bajas emisiones de postre después del opíparo banquete que perpetra Lage Tuñas , las vaciará de contenido y causará unos efectos ya irreversibles en el tráfico y movilidad en la ciudad», concluyen.