La encuesta de Sondaxe ha removido a la clase política coruñesa bastante más que los resultados que ofrece. El sondeo, a un año de las elecciones municipales, ofrece una foto idéntica a la publicada en 2021 y no recoge opciones de liderazgo porque todavía están por confirmar. El Partido Popular, que no ha anunciado un cabeza de cartel por más que en La Voz de Galicia sitúen como tal a Miguel Lorenzo, se mantiene donde estaba, con los nueve concejales que rascó Beatriz Mato en 2019, lejos de los 14 que le darían la mayoría absoluta, Ciudadanos ni está ni se le espera y Vox no llega.
Del erial en la oposición se benefician, apunta la encuesta, los socialistas. Pero sobre todo del desplome de Marea Atlántica, también sin candidato a estas alturas, que reduciría su presencia a tres ediles, por detrás supuestamente del BNG, que también recoge réditos a partir de los deméritos ajenos.
Pero la foto es fija y los invitados van a empezar a moverse. Llegarán otros nuevos, además. El anuncio de la candidatura del PP, que debería de llegar antes del inicio de verano, abrirá un nuevo escenario. También lo hará que se concrete el intento de José Manuel Sande por aunar voluntades entre los restos de la Marea. El exedil de Cultura quiere sumar.
“Non podemos estar satisfeitas co pronóstico”, apunta Marea Atlántica en una reacción publicada este domingo en sus redes sociales. Con todo, rescatan que “o sondeo Amosa unha maior intención de voto directa que hai un ano” y califican ese hecho de “moi relevante tendo en conta que a enquisa realizouse despois de anunciar a renovación radical do noso grupo no concello”. O lo que es igual, aprovechan unas migajas para darse un festín. Marea anuncia, aún así, que estamos ante un ciclo político que gira hacia la derecha.
La ausencia de cambios respecto a la última encuesta matizó las reacciones. El PP recuerda que fueron el partido más votado en las tres últimas elecciones y alerta sobre el peligro de que la ciudad vuelva a estar cuatro años más en manos de un bipartito o un tripartito. Apuntan además como la valoración del trabajo de la alcaldesa cada vez es menor.
En el BNG enfocan la encuesta con prudencia, pero satisfechos por “una tendencia al alza”. En el bando socialista también apuestan por la mesura al tiempo que ponen en valor el trabajo de Inés Rey. Aunque para entusiasmos ahí está el concejal Francisco Dinís Díaz Gallego, que este domingo además de pasarse bien temprano, para evitar los atascos, por la Ronda de Nelle a sacar unas fotos que publicó en las redes sociales, valoró la encuesta como la prueba de “la recuperación del orgullo de la ciudad”.
El concejal de Urbanismo entiende que en A Coruña se valora “el trabajo bien hecho”. Al menos este último trabajo de Sondaxe ha servido para que Dinís recupere su fe en los sondeos tras una etapa de descreimiento.