La portavoz nacional del BNG, Ana Pontón, anunció este jueves que abre un “periodo de reflexión” para analizar cuál será su papel en la formación tras la XVII asamblea que la organización celebrará el 7 de noviembre. La dirigente nacionalista considera que este tiempo será “necesario y útil para determinar” su papel, en un contexto en el que se siente “muy apoyada por todo el mundo dentro del BNG”. La decisión, explica, no tiene que ver con que haya o no otros candidatos, si bien está convencida de que el Bloque cuenta con “muchísima gente válida” y “cualquier militante puede optar a esa responsabilidad”.
En cualquier caso, Pontón argumenta que “no hay que dar nada por sentado, ni en la vida, ni en la política”, antes de incidir en que no le gusta “actuar desde la rutina si no desde la reflexión”. La portavoz nacional del BNG cree que la asamblea del 7 de noviembre va a darse “en unas circunstancias muy diferentes de las dos últimas”, en febrero de 2016 y marzo de 2017. “Se termina un ciclo político del BNG”, apunta, en referencia a los cinco últimos años, de “la resistencia” a “la consolidación” y finalizando con “el despegue”.
Pontón remarca que hoy el Bloque es “el más fuerte de su historia”, una organización “que crece”, con presencia municipal, gobiernos “que son referencia” y una organización “que incrementó su apoyo social y electoral” como “resultado de un trabajo intenso”. En esta línea, agradece el “compromiso imprescindible” de militancia y simpatizantes y ha reivindicado una “línea política que consiguió conectar” y situar a los nacionalistas “como alternativa de gobierno”. Apunta, además, que “ninguna organización ni nadie a nivel personal puede caer en la autocomplacencia”, señalando actuales “retos” como “seguir ensanchando” la base social de la formación e incrementar el peso de sus votantes en las próximas elecciones.
Al respecto, la dirigente del BNG apuesta por unas “bases sólidas para enfrentar con garantías de éxito” un objetivo “de primera magnitud” como es “prepararse” para gobernar la Xunta “desde la presidencia” y ha incidido en que la reflexión de cara a la XVII asamblea no es solo colectiva, sino también “a nivel individual”. Esa asamblea “tiene que ser el inicio de un nuevo ciclo en el que el BNG sea un actor decisivo” y por eso “no solo es momento de reflexión colectiva”, recalca. Y es por ello que declara abierto un periodo de reflexión personal: “Soy una persona que cree que en la vida no hay que dar nada por hecho, que los logros hay que conquistarlos cada día (…) Hay que pensar las decisiones y actuar con valentía, sopesando los pros y contras y pensando con rigor, seriedad y después trabajar sin ningún desaliento, con todo el ánimo y toda la fuerza”, expone.
En este punto, Pontón recuerda como hace cinco años pasó por un momento que le quitó “muchas horas de sueño” antes de aceptar ser portavoz nacional, una decisión de la que no se arrepintió, ha dicho, “ni un solo día”. Ahora apuesta por abrir “esta reflexión”. “Quiero tomarme un tiempo de reflexión personal sobre cuál tiene que ser mi papel. Estamos en unas circunstancias en que cambió la situación del BNG. Tiene nuevos retos y tengo que valorar si me siento la persona más adecuada para esta nueva situación”, concluye.